9 noviembre de 2022
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Paso 01. Lo primero que haremos será desmontar la puerta y quitar los elementos que no vayamos a pintar como la manija. Debemos lijar, siguiendo la dirección de la veta de la madera, con una lija de grano medio, no en profundiad sino solo repasar para quitar el brillo del barniz. Así lograremos que la pintura agarre mejor.
Paso 02. Utiliza POXIPOL® Transparente para reparar las partes rotas, se puede lijar y pintar una vez curado.
Paso 03. Es importante dejar la superficie limpia y sin restos de polvo, entonces limpiaremos con un trapo húmedo o con un cepillo. Si la puerta tiene molduras, limpiar bien los ángulos.
Paso 04. No sin antes cubrir con cinta las zonas que no queremos pintar, vamos a empezar a pintar. Lo primero que haremos será cargar el depósito de la pistola con la pintura. De acuerdo al tipo de pintura le anadiremos agua y revolveremos bien para evitar que haya grumos y que la densidad sea uniforme.
Paso 05. Antes de pintar sobre la superficie es recomendable hacer pruebas sobre un cartón para ver que la pintura sale correctamente y de la forma que deseada. Para eso se puede adaptar el caudal de pintura, la boquilla para la dirección en la que sale la pintura o ajustar la intensidad.
Paso 06. Ya solamente quedará pintar. La aplicación de pintura con la pistola es muy fácil y uniforme y se logra un buen acabado. Además, como el secado es muy rápido podremos dar una segunda mano enseguida.
Paso 07. Dejamos secar, sacamos las cintas, colocamos los elementos que habíamos quitado y listo. Puerta renovada.
¿Te animas a hacerlo? Cuéntanos como te fue. Y disfruta más tutoriales y consejos recorriendo nuestro blog.
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